capítulo veintiuno

ayer estaba en mi casa, me visitaron el piolo y aurea.
a aurea alguna vez la invitamos al yak y le dijimos: mira tu le pones 20 varos que es el mínimo y te pones a jugar, pides un sandwich yak club que estan bien chidos y después de las 5 están al 2x1 entonces puedes comer y jugar con la posibilidad de ganar por solo $50.
así quedó. ayer en la noche me di cuenta de que aurea ahora es adicta al juego e invitó a su mamá y a su hermana y ahora a su papá. conforme me platicaba que ya era como una jugadora profesional, más no muy exitosa, un día apostó toda su raya y la perdió, me dijo que casi lloraba de la desesperación de haber perdido todo. luego le pidió prestado a su mamá $200 para seguir jugando con los cuales se recuperó y no pasó a mayores el asunto. pero... ya perder toda tu raya en el juego no está padre. me hizo sentir un poco mal de haberla llevado en un primer lugar.
creo que nunca le dijimos la parte de: pues si es que esos $20 ya los damos como perdidos y si ganamos chido, si no pues comimos y jugamos por $50.

mal trip.